La música que nos devuelve la voz: Sergio Feferovich y el arte de humanizar en tiempos de pantallas : Crónica del concierto-entrevista

19 Nov 2025

     La tarde del 18 de noviembre en Algezares, antes de que el auditorio empezara a llenarse y de que la música tomara su sitio en el aire, nos reunimos con Sergio Feferovich para charlar un rato. Era un momento tranquilo, íntimo casi, mientras los técnicos hacían pruebas de sonido y los focos iban encontrando su luz definitiva. Esa conversación, improvisada pero cálida, terminó siendo una puerta de entrada perfecta al concierto que estaba por empezar.

     Lo que pasó allí dentro —un diálogo sereno, lleno de ideas, de humor sutil y de reflexiones sobre tecnología, música y comunidad— ayudó a entender todo lo que viviríamos después. Feferovich tiene esa manera tan suya de unir pensamiento y acción: lo que dice se refleja luego en cómo toca; lo que defiende, en cómo mira al público; lo que piensa sobre lo colectivo, en la energía que construye en escena.

     Más que una entrevista, fue un prólogo. Una brújula que, sin darnos cuenta, ya nos estaba orientando hacia la noche que vendría.

“Lo que yo hago humaniza”: la música frente a las pantallas

     Le preguntamos por la inteligencia artificial, por las redes sociales, por esa sensación de que cada vez hablamos más con pantallas que entre nosotros. Respondió sin prisa, con un tono tranquilo, casi de quien comparte algo que lleva tiempo pensando:
“El éxito de lo que yo hago —y creo que la gente lo nota— es que nos humaniza. Estamos juntos, escuchando música, cantando, riéndonos…”

     No dramatiza la tecnología ni cae en fatalismos. Prefiere mirar atrás para entender el presente. Recordó que cuando apareció la imprenta algunos dijeron que la memoria humana se perdería; cuando llegó la televisión, se temió que nos volvería pasivos. Y aquí seguimos.

     “La IA será otro escalón”, dijo. “De la imprenta dijimos que nos ayudó a leer, de la televisión que nos conectó de otra manera… quizá la IA termine liberándonos tiempo para lo que de verdad importa”.

     Luego mencionó algo curioso: muchas escuelas están volviendo a la evaluación oral para evitar que la IA haga el trabajo por los alumnos. “La única forma de asegurarse de que un chico entiende algo es escucharlo hablar”, nos dijo.
Ahí citó a Verdi: “Volvamos al pasado, y eso será progreso”.
Volver a explicarnos. A mirarnos. A hablar.

Música, ideas y humor: el origen de una fórmula propia

     Quisimos saber de dónde sale esa mezcla tan característica suya: música, humor, reflexión, cercanía.
     “Empezó como un charlateo”, admite sonriente. “Siempre me gustó explicar lo que tocaba, y veía que la gente lo agradecía”.

     Ese impulso casi pedagógico, unido a un humor que le nace espontáneamente, fue creando un estilo propio. No lo fuerza. No lo calcula. Simplemente, le sale.
     “Combino música, humor y docencia, y a la gente le gusta”, dice como quien lo reconoce sin darle demasiada importancia.

     Pero en realidad es una manera de tender puentes.

De la música a la historia… ¿y al revés?

     Una de las cosas más bonitas de sus conciertos es cómo una melodía se transforma en una historia que cada cual imagina a su manera. Le preguntamos si se podía invertir ese proceso: escribir música que cuente una historia muy concreta.

     “Es un lindo desafío”, respondió. Habló de Beethoven y de Vivaldi, pero enseguida fue al centro de la cuestión:
     “La música es un arte que dicta sus propias leyes. Podemos describirla con palabras, pero no podemos escribir palabras con música”.

     La música, insiste, siempre deja un espacio abierto. Donde un texto fija un paisaje, una melodía abre muchos distintos. Y ahí está lo maravilloso.

Un público que entra en escena

     Poco después, ya dentro del auditorio, todo lo escuchado en la entrevista cobró sentido. En sus conciertos el público no está para mirar: está para entrar. Feferovich conversa, pregunta, bromea, improvisa. Se mueve con naturalidad entre la explicación y el piano. La música fluye sin interrupciones; más bien, se ensancha.

     La sala de Algezares terminó convertida en una pequeña comunidad. Había risas, silencios muy atentos, murmullos de sorpresa… y hasta voces del público que se integraban en la propuesta. Aquello no se consumía: se compartía.

Una estética del encuentro

     Más allá de lo bien que toca, o de lo claro que explica, lo que hace especial un concierto suyo es la forma en que transforma la música en encuentro humano. En un tiempo donde todo parece suceder detrás de un cristal, su concierto fue un espacio donde la presencia recuperó valor.

     Cuando en la entrevista dijo que “lo que hago humaniza”, no estaba ensayando una frase bonita. Lo estábamos viendo materializarse allí mismo.

La IA y el futuro del arte

     Aunque en escena no haya pantallas ni tecnología, su pensamiento sí dialoga con el presente. No le teme a la IA. La observa con curiosidad, con cautela quizás, pero sin miedo.
Lo que tiene claro es que ningún algoritmo puede sustituir ese momento en el que un músico y un público comparten aire. Esa vibración que se contagia de persona a persona. Ese calor.

Una noche que confirma un propósito

     Cuando el concierto terminó, la reacción fue inmediata: la sala entera se levantó para aplaudir. Fue una ovación larga, sincera, de esas que no se fuerzan. Algo había pasado allí dentro. Algo que no se repite ni se reproduce.

     Todo lo hablado unas horas antes —la oralidad, el contacto directo, la música como espacio de comunidad— se había hecho realidad durante la noche.

     No era nostalgia. No era rechazo a la tecnología. Era un recordatorio de que el presente también puede ser profundamente humano.

Conclusión: volver a escuchar, volver a hablarnos

     Sergio Feferovich no solo toca música. Crea un espacio en el que recordamos algo básico: que necesitamos encontrarnos, escucharnos, narrarnos. Sus ideas sobre la IA, su humor espontáneo, su forma de explicar, su manera de mirar al público… todo apunta a lo mismo: la música es uno de los lugares donde seguimos siendo, simplemente, personas.

     En un mundo que corre, él propone algo sencillo y radical:
pararnos un momento y escuchar juntos.

RELATED POST

Leave a reply

Conéctaté y síguenos

BOLETÍN DE INFORMACIÓN

Introduce tu email para suscribirte

INFORMACIÓN DEL CONTACTO

© 2018-2022 ENC News Spain. Todos los derechos reservados. Para contactar con nosotros :

  • Barcelona (Spain)

  • Enc.news.spain@gmail.com

  • +34617375024

  • 8 a 19:00